Una
importante revisión científica realizada por el doctor Chris
Kahlenborn, MD, et
al, publicada la semana pasada en
la revista Linacre Quarterly,
encontró que la anticoncepción de
emergencia que contienen la hormona levonorgestrel, también conocida como el
Plan B, tiene "un importante
potencial de trabajar a través del
aborto." La revisión también reveló
que los argumentos que alegan que el
plan B no es un
abortivo no se pueden defender científicamente.
Estado actual del uso del “plan B” en los hospitales:
Actualmente los protocolos de hospitales inclusive católicos, indican que si se presentan víctimas de violación, el cuidado médico debe incluir esfuerzos para evaluar si una mujer ha ovulado (y por lo tanto posiblemente concebido). Esto se hace mediante la recolección de la historia de sus ciclos de fertilidad, haciendo un análisis de la hormona LH, y la realizando otras pruebas o intervenciones que, a juicio del médico, ayuden a establecer la certeza prudencial que la anticoncepción de emergencia, si se proporciona a la víctima, funcionaría adecuadamente como un anticonceptivo y no como un abortivo.
Estado actual del uso del “plan B” en los hospitales:
Actualmente los protocolos de hospitales inclusive católicos, indican que si se presentan víctimas de violación, el cuidado médico debe incluir esfuerzos para evaluar si una mujer ha ovulado (y por lo tanto posiblemente concebido). Esto se hace mediante la recolección de la historia de sus ciclos de fertilidad, haciendo un análisis de la hormona LH, y la realizando otras pruebas o intervenciones que, a juicio del médico, ayuden a establecer la certeza prudencial que la anticoncepción de emergencia, si se proporciona a la víctima, funcionaría adecuadamente como un anticonceptivo y no como un abortivo.
El problema esta en que los
médicos que dispensan LNG-EC [Plan
B] para las víctimas de violación
en el período preovulatorio. . . están dando LNG-EC en un momento en
el ciclo menstrual de una mujer cuando tiene un gran potencial para trabajar a través de la muerte del embrión. Los médicos que dispensan LNG-EC en el
período post-ovulatorio pueden
estar aumentando el riesgo de que
la mujer logre un embarazo, puesto que después de la implantación el "plan B" no funciona.
Esto quiere decir
que la efectividad del plan B para evitar el embarazo, se basa en mecanismos de
acción que ocurren antes de la ovulación y pueden causar que el embrión recién formado
no logre implantarse en el vientre materno.
"Los defensores del Plan B, les han asegurado a los obispos católicos, que no causa un aborto", dijo Judie Brown, presidente de American Life League. "Ahora sabemos que esto no es cierto. Existe un grave riesgo de que la vida humana de los bebes no nacidos sea cegada por Plan B, y los hospitales católicos tienen que detener inmediatamente la dispensación de estos medicamentos y revisar sus políticas”.
Los autores del articulo concluyeron que "los hospitales católicos que permiten la distribución del [Plan B] antes de la ovulación, en especial cuando se administra dentro de las 48 horas antes de la ovulación permiten el uso de un medicamento que tiene un importante potencial de trabajar a través de aborto. . . . Si se administra antes de la ovulación, LNG-EC debe ser etiquetado como abortivo de emergencia / anticonceptivo ".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario