Sobre la anticoncepción y la violencia que se avecina

El siguiente es un resumen del segundo reporte de la entrevista realizada por John Westen al teólogo personal del Papa Francisco el Padre Giertych .

(Tomado de LifeSite News.com)

"Creo que claramente podemos ver que la crisis económica que estamos observando en el mundo occidental es una consecuencia directa que viene desde 1968, por el rechazo a la encíclica Humanae Vitae (la encíclica que reiteró la enseñanza católica en contra de la anticoncepción), el rechazo de la enseñanza de la Iglesia, y la aprobación a la revolución sexual, que ha causado una caída demográfica. "Esas fueron las palabras del Reverendo. Wojciech Giertych, OP, teólogo de la Casa Pontificia, en una reciente entrevista con LifeSiteNews.com en la que el prelado, relata la  historia y da unas proyecciones fascinantes.

Mas allá de señalar la realidad de que las personas están trabajando menos y viviendo más tiempo, el padre Giertych analiza lo que crea inestabilidad económica: "es la cuestión moral de gastar dinero y tirar la deuda a la próxima generación, una generación que ha sido en parte anulada, que no ha visto la generosidad de sus padres", y lo describió como "la preparación de un conflicto violento entre las generaciones”.

"Estoy viendo esto crecer, sobre todo en Europa", añadió el Padre Giertych. "En Estados Unidos por lo menos tienes un debate público acerca de la moralidad de la ampliación de la deuda pública y el arrojar la responsabilidad en la generación futura."

Los niños que viven en la pobreza debido a que sus padres sufrieron una tragedia o la guerra, pueden vivir con sus circunstancias, entendiendo la calamidad que los llevó a su estado, explicó. Él lo comparó con que sin embargo, "un gran segmento de la sociedad se queja de que son pobres en comparación con lo que tenía la generación de sus padres, no porque hubiera una catástrofe, pero debido a que la generación de sus padres consumió toda [la riqueza], y arrojó la responsabilidad en ellos".

El teólogo del Papa se refirió a las violentas protestas de los jóvenes y el desempleo masivo en Europa. "Ellos  generalmente dicen: ‘Nosotros tenemos el derecho de recibir’, debido a que sus padres recibieron becas para sus estudios, recibieron viviendas más baratas, por lo que tienen este sentido de derecho que es una consecuencia del socialismo - alguien tiene que dar. "

El padre Giertych advirtió que "en última instancia, habrá un conflicto violento."

Él dijo: "Y los estados están finalmente diciendo, 'No podemos dar. Hay un límite, ya sabes. ¿Hasta dónde podemos ir? "Y, por supuesto, el estado puede producir dinero y estar más y más endeudado, pero al final habrá un conflicto violento, y la eutanasia es uno de los aspectos de este conflicto, que es una consecuencia directa del rechazo a la transmisión de la vida y la distorsión de la sexualidad. En última instancia, todo se reduce a la anticoncepción – esta es una consecuencia”.

El padre Giertych dijo que La Iglesia, va a tener una respuesta para los jóvenes, una respuesta que tendrán y estarán contentos de oír. "Creo que llegará un momento en el que los jóvenes tendrán que escuchar, estarán encantados de saber que la Iglesia tiene una voz que estará a su lado, una voz que muestre el egoísmo de la generación hedonista que ha distorsionado la sociedad ", dijo. "Y se ha distorsionado la sociedad comenzando en un punto focal muy importante, que es la sexualidad ... y estamos viendo las consecuencias."


El padre  Giertych hizo hincapié en que el tema de la anticoncepción es una realidad que se aplica a todos. Él explicó, "no es sólo una cuestión de estar en sintonía con la enseñanza de la Iglesia, es estar en sintonía con la realidad, con la naturaleza de la persona humana y de la naturaleza del amor, que hemos recibido de Dios, mientras que la enseñanza de la Iglesia nos muestra el camino hacia ese amor supremo".

Para el Padre. Giertych no hay nada difícil sobre la respuesta de por qué la Iglesia Católica prohíbe la anticoncepción. "Debido a que distorsiona la sexualidad humana, y eleva el momento de placer sexual, mientras que niega la finalidad fundamental de la sexualidad, que es la transmisión de la vida", dijo. "La actividad sexual ha sido creada, ideada por Dios, como una forma de transmitir la vida y expresar el amor, mientras que la anticoncepción separa la transmisión de la vida la cual es excluida, y luego se centra únicamente en el placer, que genera, como consecuencia, el egoísmo."

"La razón principal por la que la Iglesia dice" no "[a] la anticoncepción", dijo el padre. Geirtych, "es porque destruye la calidad del amor, y el amor conyugal, que es una forma de expresar la gracia del sacramento del matrimonio, que es una forma de vivir la caridad divina que se infunde en el cuerpo y el alma de los cónyuges”.

Explicó que "el amor conyugal debe ser de una calidad suprema", pero la anticoncepción reduce al decir al cónyuge, 'Hay algo en ti que me encanta, pero hay algo en ti que odio, y no me gusta el hecho de que puedas ser madre. Así que necesito que esto sea envenenado’. "Bueno, eso no es amor. No es posible que un marido diga a su esposa: "Te amo de verdad", si al mismo tiempo le exige "que envenene en su cuerpo la capacidad de transmitir la vida, la capacidad de ser madre.

"Esa distorsión de la sexualidad", dijo, "distorsiona las relaciones humanas, distorsiona toda la vida-de la sexualidad humana."

Añadió:"Cuando la sexualidad no está vinculada con la virtud de la castidad, la cual entrena a la persona para integrar el deseo sexual con  la caridad, entonces todo se trastorna. Y ciertamente estamos viendo esto una vez que los anticonceptivos se hicieron tan fáciles de conseguir. Estamos viendo sucesivamente, las distorsiones de la sexualidad, y problemas en el ámbito de las relaciones humanas, los matrimonios se vienen abajo, la agresividad y violencia de las mujeres que están descubriendo que son víctimas de abusos como consecuencia de la anticoncepción, por lo que están aterrizando en un feminismo agresivo, de rabia contra los hombres. La anticoncepción está llevando al aborto, ya que trata al niño como un enemigo potencial, y si algo sale mal y un niño es concebido, entonces el niño es fácilmente abortado”.