jueves, 4 de septiembre de 2014

El aborto, la solución a la crisis de inmigración



Articulo original: Life Site News
Traducción: Liliana Cote de Bejarano

Si los Estados Unidos quieren detener la ola de  menores y adultos jóvenes que inundan la frontera del sur desde Centro América, podría ayudar que las mujeres hispanas de estos países aborten a sus hijos. Esa es la tesis de un "artículo destacado" publicado el 19 de agosto en YaleGlobal Online, una publicación de la Universidad de Yale.

Marisol Ruiz, autora del articulo,  fue una Fox Internacional Fellow (2013-2014) en la Universidad de Yale y tiene una maestría del Colegio de México. Su investigación se centra en el género y las relaciones internacionales y la interconexión de lo local a lo global.

Ella propone que el Congreso "debe imponer condiciones específicas" a los paquetes de ayuda de emergencia diseñados para detener el crimen en América Central ", asegurando que el dinero va a aplicar políticas centradas en la igualdad de género, destacando la importancia transformar las relaciones de género ".

"La perspectiva de género" en esta región muy católica implicaría “invertir en la salud materna y del recién nacido, así como la inversión en planificación familiar y salud reproductiva."

Se mostró especialmente preocupada porque la región carece de "acceso a abortos seguros y legales."

"América Central es el hogar de dos de los siete países en el mundo donde el aborto está prohibido en todos los casos", El Salvador y Honduras, Ruiz anotó. "Las consecuencias de la total penalización del aborto" incluyen "la alta mortalidad materna."

Las políticas y las organizaciones pro-vida instituidos por presidentes republicanos son señalados como la causa de la actual crisis fronteriza.

"Los partidos políticos de EE.UU  y las políticas de ayuda han sido cómplices al desalentar los recursos de planificación familiar para las naciones pobres "mediante la adopción de la Política como la de Ciudad de México. La "Ley Mordaza", como Ruiz la llamó, "aplicada esporádicamente desde la década de los 80’s por las administraciones conservadoras, prohibió a las organizaciones extranjeras que recibieran ayuda económica de EEUU y el derecho de usar fondos no estadounidenses para proporcionar información para el aborto legal o defender la legalización del aborto en su país”.

El presidente Ronald Reagan instituyó la prohibición, que se mantuvo hasta que el presidente Bill Clinton lo derogó. El presidente George W. Bush reinstauró la política en 2001, pero fue en contra derogada por el presidente Barack Obama.

Ruiz escribió que el aborto debe ser promovido en la región para "evitar enfrentarse a una crisis humanitaria en curso y abordar sus preocupaciones reales acerca de la demografía y la seguridad."

También se refirió a la "necesidad insatisfecha de anticonceptivos." En las latinas '

Élla ve el empuje para el aborto y la anticoncepción como una plantilla para ser exportada a otras naciones, particularmente las naciones pobres con una población flotante que buscan empleo o que huyen de la violencia. "Si la aplicación de estas políticas tiene éxito, las lecciones se podrían aplicar a todas las demás regiones del mundo, con la afluencia de la inmigración", escribió.

Esa descripción podría aplicarse, por ejemplo, a la minoría cristiana de Irak que esta huyendo de la zona desgarrada por la guerra.

El sitio web que publicó el artículo de Ruiz, YaleGlobal Online, es una publicación de Whitney y Betty MacMillan Center de la escuela Ivy League para estudios Internacionales y Estudios de Área. El centro está dedicado a la "globalización", que se define como "la creciente integración del mundo en función de su" interconexión e interdependencia. "Estudiosos del centro reconocen que los valores profundamente controvertidos como la cultura, la estabilidad económica de la clase media, y la seguridad nacional - "temas como el creciente sentimiento anti-inmigrante en Europa, los subsidios de Occidente agrícolas y las cuestiones de derechos de propiedad intelectual, y las políticas de visados ​​más estrictos de los EE.UU. desde el 11 de septiembre" - "podrían lanzar una llave en los motores de" internacionalistas.

Sin embargo, este sitio siente que "el proceso histórico de volver a conectar la comunidad humana" en un gobierno mundial "está aquí para quedarse y cada vez más es mas visible."

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